PORFI, MI HERENCIA
Amigos, Porfirio Díaz, o como tus amigos los mirreyes lo conocen:
El mejor presidente del mundo paps, en sus tiempos eramos practicamente Europa, el que quería se volvía rico, puro pendejo no pudo, mi bisabuelo we, mi bisabuelo, hizo un chingo de varo en esos tiempos… OYEME TU PINCHE GATO APURATE CON MI COCHE, Y CUIDADITO Y LO RAYAS PORQUE MI PAPÁ TE MATA.
Porfirio Díaz fue el presidente que más ha durado en el poder, estando 31 años en la silla y se reeligió 7 veces, que solo de mencionarlo, se pueden escuchar unos ruidos de orgasmo en Palacio Nacional, y durante ese tiempo, la modernidad llegó al país, pero también hubo mucha injusticia y miseria.
Pues 110 años después de haberse exiliado y morir en París, ha aparecido una noticia acerca de un regalo que nos dejó a cada soldado que en cada hijo dio este país, una herencia que actualmente suman los 822 BILLONES de pesos. Chúpate esa, tío Slim.
Así lo asegura el administrador del Fondo Mixto Privado de Patrimonio Autónomo y Benito Juárez panzón, Mauricio Montijo Lucero, el cual ha dado varias entrevistas estos días explicando que Porfirio Díaz quiso dejar una inversión para que los mexicanos tuvieran un mejor futuro, a lo que el Coronavirus, el sarampión y la 4T dijeron: ¿Futuro?
Supuestamente el general Díaz dejó una inversión de 5 cifras y quería que se cobrara 100 años después, por lo que gracias a los intereses ha llegado a esa estratosférica cifra, y dentro de un pantalón de Jiménez Espriú (o06) encontraron una carta escrita por don Porfirio, quien dejó instrucciones muy claras para gastarnos ese dinero:
CARTA DE DON PORFIRIO DIAZ.
Estimado pueblo mexicano del año 2020.
Espero que estén gozando de muy buena salud, ya que andan inventando vacunas para curarse de todo tipo de enfermedades, porque ¿qué clase de pendejo no se dejaría ponerse una?
Les saluda su presidente Porfirio Díaz, seguramente ustedes me leen desde su carroza voladora o en alguna especie de cinematógrafo con una pantalla del tamaño de su bolsillo, donde quiera que estén, me gustaría informarles que les he dejado un dinerito que se merecen por aguantar a este viejo terco, metí al banco unas monedillas de oro que me sobraban y espero que en el año 2020, cuando sean unos 3 millones de mexicanos mas o menos, se lo repartan, pero con una condición: Gástenlo en mujerzuelas y juegos de azar.
Los dejo porque anda chingando un tal Madero aquí en la puerta, pero como vivo en Chapultepec ahorita se lo truenan, que bueno que no fui a vivir al Palacio Nacional, puro meco quiere vivir ahí.
Los quiere, su presidente, el general Porfirio Díaz.
Y en caso de repartirnos la lana, estaría quedándonos a cada quien entre unos 47 y 80.. Mil pesos, por… mexicano, cágate.
Y entre que esto pueda ser real o no, el mexicano promedio seguro ya se gastó esa lana que acaba de saber que existe, porque asi somos, ni pedo, y en el poco creíble caso de que el PRI se le haya pasado esa lana, que ni de pedo se les fue, estamos seguros que antes que nos caiga el dinero, veremos un anuncio así:
ANUNCIO DE AMLO
Debido a la noticia de que el expresidente Porfirio Díaz nos dejó una herencia para todos los mexicanos, excepto para mi nieto que nació en Estados Unidos, les vengo a pedir su ayuda con un porcentaje.
Como ustedes saben, el dinero es malo, fuchi guacala, excepto para el gobierno, sabemos que ustedes se lo gastarían en mujerzuelas y mota, mejor inviertan en nosotros, en México, con el 50% del dinero de cada uno de ustedes, podemos hacer la refinería de Dos Bocas, el tren maya y que llegue hasta Tijuana si queremos, tapar el bache de tu calle con aguacate, Santa Lucia y hasta el de Texcoco, chingue su madre, para que ya se callen a la verga todos.
Montijo dice que el dinero está guardado en bancos internacionales y que la Secretaría de Hacienda y banco de México se han encargado de mantener en secreto esta información, incluso a los presidentes. Porque los presidentes son como cuando tu mamá te decía “ah, te dejó dinero tu tío, yo aquí te lo guardo mi rey no te preocupes”.
Sinceramente esto suena demasiado bueno para ser verdad, y aunque esa lanita si nos caería mejor que un clamato en la cruda, no queremos hacernos ilusiones de algo que no hay mucha información al respecto, sin embargo, si nos cae, tampoco nos enojamos. Show me the money, Tío Porfirio.